Mélange 007: ¿Y si dejamos morir a la clásica?

Tras la pandemia, la clásica llena cada vez menos las salas de conciertos. Por otro lado, cada vez hay más músicos cualificados ofreciendo recitales de máxima fineza y elegancia. Pero, seamos franc@s, la mayoría del público aún prefiere otros estilos y nos ganan por goleada.

¿Qué ocurre entonces?¿Hay que dejar morir la clásica como la vemos y la vivimos hoy día para que pueda renacer de alguna manera?¿Qué estamos haciendo mal y qué podemos mejorar?

Joseph Haydn, al final de muchas de sus sinfonías, escribía “Fine Laus Deo” (“Fin, alabemos a Dios”), algo que le dejaba cerrar ese capítulo y continuar componiendo. ¿Tenemos entonces que escribir nuestro propio Fine para poder continuar con cosas nuevas?

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¡Te esperamos en el último Mélange de la temporada!